No se puede subestimar lo importante que essofáes para tu vida diaria. Es la base de la paleta de diseño de su sala de estar, el lugar de reunión para que sus amigos y familiares disfruten de un tiempo de calidad y un lugar cómodo para descansar después de un largo día. Desafortunadamente, no duran para siempre.
A sofá de calidadDebe permanecer en buenas condiciones durante muchos años (en promedio, entre siete y 15 años), pero ¿cómo se sabe cuándo se acaba el tiempo? Ya sea que su sofá ya no se adapte a su estilo o espacio, o simplemente haya tenido mejores días, hay muchas señales de advertencia a las que debe prestar atención.
Al invertir en una pieza atemporal y bien hecha que le resulte personal, su espacio puede evolucionar naturalmente con usted durante muchos años.
Con la ayuda de algunos expertos, hemos desglosado seis señales de que es hora de deshacerse de su sofá actual y disfrutar de una actualización; con suerte, una que le encantará durante años (y años) por venir.
Su sofá ya no sirve para sus necesidades
Si los viejos tiempos de las noches en solitario relajándose en el sofá ya quedaron atrás, y tal vez los haya cambiado por hacer rebotar a un bebé en sus rodillas y recibir invitados durante la noche, necesitará que su sofá funcione de diferentes maneras.
Simplemente no es cómodo
El objetivo principal de un sofá es proporcionar un lugar cómodo para sentarse, levantar los pies y disfrutar de una noche de cine en familia. Si te duele la espalda después de una sesión en el sofá, es hora de ir a comprar muebles.
Escuchas ruidos crujientes
Los sonidos de crujidos o estallidos son una señal de que el marco de madera de su sofá o los resortes o las correas de la plataforma del asiento están comprometidos. Eso no solo puede afectar su capacidad para sentarse y relajarse (los resortes puntiagudos y las superficies irregulares no van de la mano con la comodidad), sino que también puede ser potencialmente peligroso. Es hora de actualizar.
Después de mudarse, su viejo sofá no se adapta a su nuevo espacio
Mudarse a una nueva casa es la oportunidad perfecta para valorar el mobiliario que te rodea. Lo más probable es que su nuevo espacio incluya diferentes desafíos de diseño y proporciones de diseño de su espacio actual: una sala de estar larga y delgada, tal vez, o entradas difíciles de solucionar. Es posible que su viejo sofá simplemente no encaje o no sea propicio para su nuevo hogar.
La tapicería no se puede reparar
Los sofás lo ven todo: daño solar, copas de vino tinto descarriadas, accidentes de mascotas, lo que sea. Si bien es de esperar un poco de desgaste, a veces un sofá simplemente no puede recuperarse, especialmente si los desgarros y agujeros han expuesto espuma, relleno o plumas.
Una buena limpieza profesional puede hacer maravillas en un sofá, pero si la tela está rota o descolorida, no hay mucho que se pueda hacer. Lo mejor es empezar de nuevo en ese escenario.
Al comprar un sofá nuevo, es importante elegir una tela que resista el paso del tiempo, incluidas las pegajosas manchas de mantequilla de maní y los rasguños de gato. Seleccionar una tela que sea resistente a derrames, manchas y rayones le ahorrará dolores de cabeza y dinero con el tiempo.
Te entra el pánico y lo odias
No está solo: la mayoría de nosotros hemos realizado al menos una compra importante de la que nos arrepentimos. En ese caso, considere revender su sofá usando una aplicación local o buscar una organización benéfica local para donarlo.
Hora de publicación: 10-octubre-2022